Hoy en día, los gastos que comporta la compra y el mantenimiento de un coche pueden dispararse fácilmente, y por eso muchos compradores se decantan por el mercado de segunda mano, donde se sienten protegidos por las garantías legales que les ofrecen los comerciantes. Como resultado, las reparaciones imprevistas —y, sobre todo, costosas— son la principal pesadilla de los vendedores de coches de ocasión, que ven cómo sus márgenes de beneficio se evaporan cuando los vehículos que venden sufren averías graves. OPENLANE ha elaborado una lista de los 10 componentes que debe absolutamente revisar dos veces (o diez, si así se queda más tranquilo) si quiere evitar males mayores.

1. Cilindros

Detrás de la mayoría de los problemas que afectan a los cilindros está la pérdida de compresión, que puede deberse al desgaste de los anillos de pistón, a una fuga en la junta de culata o a fisuras en la camisa. Por lo general, si el propietario llevaba al día el mantenimiento del coche, estos casos no se dan nunca. Un motor que emite un ruido raro, como si tartamudease, es un pájaro de mal agüero. Si notase algo así, intervenga inmediatamente, ya que de lo contrario se arriesga a tener que desembolsar una cantidad importante de dinero.

2. Sistema de propulsión híbrido

Un coche híbrido no tiene por qué resultar más caro que un coche con un motor de combustión interna convencional. Esto es lo que dice la teoría. Pero en la práctica, la escasez de piezas de repuesto deriva en un precio de compra más elevado, aunque es posible que la hibridación invierta esta tendencia en los próximos años. El principal quebradero de cabeza en un vehículo híbrido es el inversor, que es el componente que transforma la corriente continua de las baterías en corriente alterna para el motor. Los defectos en esta pieza son poco frecuentes, pero muy difíciles de detectar. La única señal de aviso es una lucecita que se enciende en el salpicadero y que, sin dar más detalles, recomienda simplemente revisar el motor.

3. Baterías de ion-litio

Al igual que ocurre con los vehículos híbridos, seguimos a la espera de que se produzca un gran avance en el campo de la ingeniería eléctrica que reduzca el precio de la tecnología que está detrás de las baterías. El éxito de Tesla es un primer paso en la dirección correcta, ya que supone el necesario aumento de la escala de producción, pero hay varios fabricantes europeos que este año han hecho grandes progresos en el mismo sentido. Muchas baterías siguen siendo propiedad de la marca, lo que se traduce en la obligatoriedad de firmar un contrato de alquiler. La parte positiva es que el cliente recibe una garantía. Por otro lado, las baterías de ión-litio se acercan cada vez más a la fiabilidad de sus homólogas de níquel, y todo indica que los precios bajarán significativamente en un futuro próximo.

4. Caja de cambios

La caja de cambios es una de las partes más importantes de un coche y, al mismo tiempo, una de las más expuestas al desgaste por uso. Un manejo inapropiado de la caja de cambios —y con esto no estamos señalando a nuestras conductoras— puede resultar devastador. En el caso de los cambios automáticos, los problemas relacionados con el líquido de la transmisión son los culpables de nueve de cada diez averías. Dado que su ritmo de cambio es más lento que el del aceite del motor, muchos conductores se olvidan de él. La caja de cambios DSG, del grupo VAG, da muchos problemas, sin embargo, a veces basta con cambiar el aceite y limpiar el bloque de válvulas para resolverlos. Pero si se necesita sustituir un embrague o instalar una caja de cambios totalmente nueva, el gasto puede ser realmente cuantioso.

5. Motor

¿Está pensando en comprarse un coche tirado de precio con un motor trucado? Aunque resulte tentador, debería pensárselo dos veces si no quiere acabar llevándose una chatarra a casa. Además, es muy probable que el motor presente importantes daños internos que le obligarán a pasar por el taller para realizar una puesta a punto o, en el peor de los casos, cambiarlo por uno nuevo.

6. Árbol de levas

Los problemas con el árbol de levas (o su sensor de fase) son relativamente poco frecuentes, a menos que se trate de un coche —o mejor un dicho, de un propietario— que no haya respetado la frecuencia necesaria del cambio de aceite. Si aparecen y el polvo y la suciedad se acumulan en las válvulas, la reparación será laboriosa y larga. Son muchas las marcas conocidas que sufren este tipo de averías, principalmente causadas por el empleo de componentes de baja calidad y por problemas en la cadena de suministro. Por lo tanto, parte de la responsabilidad reside en el fabricante, y el problema puede persistir aunque se haga un mantenimiento adecuado del vehículo. Si el motor traquetea al arrancar el coche en frío o si emite un ruido raro, como si tartamudease, estando en pleno funcionamiento, acuda a un taller.

7. Junta de culata

La junta de la culata es una pieza clave, ya que actúa de sello entre el bloque motor y la culata o tapa de los cilindros. Los problemas con la junta de culata suelen provocar daños colaterales en forma de sobrecalentamiento del motor y fugas del líquido refrigerante. El síntoma más habitual es un humillo blanco que sale del tubo de escape. La pieza en sí no es cara, pero repararla requiere mucha destreza y una cantidad importante de tiempo.

8. Llaves (¡!)

Aunque suene raro, sustituir las llaves de un coche hoy en día puede resultar muy caro. Para entenderlo, soy hay que pensar en los miniordenadores que vienen con los BMW Serie 7, que permiten aparcar el coche a distancia. En el caso de las llaves «normales», solo por el hecho de tener cierre centralizado deben reconfigurarse para poder abrir el coche en cuestión, y no sale precisamente barato.

9. Condensador del aire acondicionado

En condensador del aire acondicionado convierte el gas refrigerante en un fluido. Está situado en un lugar vulnerable: frente al radiador y expuesto a los golpes de piedras y otros objetos, que pueden provocar fugas. En invierno también puede ser pasto de la corrosión por culpa de la sal que se echa en las carreteras. Al encender el aire acondicionado, el condensador queda sujeto a una presión elevada, lo que puede dar lugar a fugas. Sustituirlo es la única solución viable.

10. Caudalímetro

El caudalímetro o medidor de masa de aire mide el caudal de aire que entra en el motor y controla la cantidad de carburante que se inyecta en el mismo. Los problemas en el sensor suelen deberse a que el filtro del aire está atascado o, en otras palabras, a que no se cambió cuando tocaba. Sustituir un filtro cuesta muy poco, pero no podemos decir lo mismo de un medidor de masa de aire.

Vehículos con averías en OPENLANE

En OPENLANE, los coches que presentan alguno de los defectos anteriormente señalados suelen venderse en subastas independientes para coches con daños. En ellas, distinguimos entre coches con daños técnicos y coches con daños en la carrocería. Alrededor del 4% de los vehículos que se venden presentan daños técnicos. Los coches que se venden en las subastas normales también pueden tener algún tipo concreto de daño, en cuyo caso se indicará y describirá en nuestros informes de daños. Si busca vehículos con daños, utilice el filtro de búsqueda avanzada.

Los coches con algún tipo de daño técnico an acompañados del siguiente icono identificativo: 

Los coches con algún tipo de daño en la carrocería van acompañados del siguiente icono identificativo: